Jesús, en Ti confio

De acuerdo a las indicaciones de Nuestra Amada Madre, la Virgen María, en el mensaje del 01-12-2013, Madre de la Salvación 

Para ver el mensaje completo con las indicaciones de Nuestra Madre para hacer la Novena,  click en imagen

Esta es la oración; Cruzada de Oración (130) 
que debéis decir  cada uno de los siete días, 
(3 veces al día por las mañanas)

Cruzada de Oración (130)
 Novena de Salvación:

Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo.

Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás.

Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que Lo rechazan, que Lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos.

Te imploramos Madre querida, que pidas por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.


Tarjetita autorizada, para hacer copias y repartir 



domingo, 19 de octubre de 2014

Recordad que después de la Segunda Venida, no existirá el Purgatorio

Jueves 9 de octubre de 2014 a las 20:40 hrs.


Mi muy querida bienamada hija, cuánta sed tengo por el amor del hombre y cuánta sed tienen ellos de Mí. Pero, la división que separa al hombre de Mí, El Dador de la Vida, es el mayor enemigo de la raza humana.

Satanás, con sus astutas maneras engañosas, significa(quiere decir) que genera grandes divisiones en el mundo. Que él esté oculto, le da un gran poder sobre las almas de los hombres. Su influencia maligna crea dudas acerca de Mi Existencia en aquellos con(que tienen) poca fe. Él convence a otros, que no creen en Mí, de que el hombre es responsable de cualquiera de las decisiones que haga. Su influencia tranquilizante(reconfortante), mientras seduce al hombre, convence a los que él tiene acceso, de que el mal es lo correcto y de que lo bueno es malo. El presenta el amor como lujuria; el odio como una forma de deseo; y la envidia y celos como un medio por el cual se justifica la destrucción de la vida de otra persona.

Cada idea, cada deseo, cada anhelo y apetencia que siembra en el alma de los hombres, los lleva al pecado. Así que tanta infestación entre la humanidad, en este tiempo, indica(significa) que el amor puro, que viene de Dios, ha sido reemplazado por la lujuria. Todo lo que surge/proviene de la serpiente, será presentado dentro de los corazones de los pecadores como siendo una cosa buena. El pecado, es siempre justificado por los pecadores que sucumben al diablo. El pecado, una vez justificado, es entonces glorificado hasta que se asemeja a un gran acto - digno de reconocimiento.

¡Ay del hombre que se atreve a desafiar a los que glorifican el pecado! El pecador que acepta el pecado, con gran regocijo, influirá en los demás para que hagan lo mismo. Hoy en día, la influencia del maligno se puede ver en todas partes. Mientras que antes, los actos pecaminosos fueron cuidadosamente ocultados, ahora no tienen vergüenza en presentarlos para que el mundo sea testigo. Todo lo que es aborrecible para Mí está siendo aceptado con gran entusiasmo. El mal se presenta como bien y todo lo que es correcto, de acuerdo con las Leyes de Dios, se considera que es malo. Cuando el diablo está trabajando, todo se presentará al revés y en exacta oposición a aquello que viene de Mí. Sabed que cuando Mi Palabra sea declarada como equivocada, la influencia del maligno ha alcanzado su punto máximo.

Recordad que después de la Segunda Venida, no existirá el Purgatorio. El cielo y la tierra se convertirán en uno y el Infierno se convertirá en el lugar de morada para aquellos que idolatran al demonio, y todo lo que viene de él. Los humos de sus malignos y siniestros caminos han infestado tanto a los que creen en Mí, como a los que me rechazan. Nadie está a salvo.

La oración, Mis amados seguidores, es vuestro refugio. Defended Mi Palabra y orad, no por vosotros mismos, sino por aquellos que han entrado en un pacto/convenio con el maligno. Ellos necesitan vuestras oraciones, mañana, tarde y noche.

 Vuestro Jesús