Jueves 12 de julio de 2012 a las 10:50 hrs.
Mi muy querida
bienamada hija, no dejes que ningún hombre subestime el impacto que El
Aviso tendrá en toda la humanidad.
El Aviso para muchos será un acontecimiento aterrador,
cuando parezca como que el mundo ha llegado a su fin.
Muchos presenciarán lo que pareciera ser un suceso
catastrófico cuando dos cometas parezcan chocar y explotar cerca de la
superficie de la Tierra.
Las llamas de fuego parecerán como si un volcán hubiera
hecho erupción en los cielos y muchos estarán aterrorizados.
Los rayos de fuego rojo serán los Rayos de Mi Sangre, los
Rayos de Mi Misericordia serán dados a todos vosotros como un Regalo de tal
magnitud que ningún hombre será capaz de comprender lo que está sucediendo.
Muchos sentirán un fuego ardiendo a través de sus cuerpos
como si el calor del sol les abrumara.
Ellos sentirán por dentro un calor abrasador, hasta que el
sentido de la comprensión les permita presenciar el espectáculo de sus almas.
Muchos sentirán la Tierra temblar como si hubiera un
terremoto.
El suelo temblará, crujirá y muchos se caerán agarrándose a
lo que sea que puedan para protegerse.
Sin embargo, el suelo no se abrirá ni se los tragará. Ya que
este no es un terremoto físico sino uno sobrenatural.
Antes de que esto suceda los patrones climatológicos
estallarán.
Mi Cruz aparecerá después de la explosión en los cielos.
Muchos llorarán lágrimas amargas de remordimiento y
tristeza, y sufrirán el dolor de la humillación debido a sus pecados.
Otros gritarán y maldecirán porque ellos no serán capaces de
resistir la iluminación – una señal divina – debido a la oscuridad de sus
almas, y se resistirán a la Luz de Mi Misericordia.
Ellos aullarán con el dolor de los fuegos del Infierno a
medida que Mi Señal de Misericordia les mostrará el destino que les espera, a
menos que se arrepientan y cambien sus caminos
Aquellas almas buenas que me aman también sufrirán porque
muchas de ellas estarán también manchadas con pecado, pero recibirán Absolución
instantánea. Ellas también, serán humilladas, cuando su pecado de orgullo les
sea mostrado.
Muchos se quedarán sin querer salir por algunos días después
y muchos tendrán que valerse por sí mismos debido a la falta de servicios. Esta
es la razón por la que necesitáis prepararos.
También habrá un período de sufrimiento cuando las almas
sufran el dolor del Purgatorio a medida que su purificación se lleva a cabo. De
esta manera muchos experimentarán una revelación del estado de sus almas y se
volverán humildes de una forma que nunca habían experimentado antes.
La conversión será global y en una escala no presenciada
desde Mi Muerte en la Cruz.
Miles de millones se volverán a Dios porque la Verdad se
hará evidente.
Ellos sabrán exactamente qué sucederá en el Día del Juicio y
sabrán cómo salvar sus almas porque Mi Amor los habrá envuelto.
Ellos podrán volverse sanos de nuevo en mente, cuerpo y
alma.
Mi Cruz será la prueba de Mi manifestación de Mi Divina
Misericordia prometida a la humanidad por tanto tiempo. Será vista en los
cielos por todo el mundo.
Una calma descenderá a lo largo de la Tierra como resultado
de este acto de la Intervención Divina dado a los hijos de Dios para
despertarlos de su letargo.
Pero los ángeles caídos atacarán a todos los hijos de Dios a
través de su dedicado ejército que rechazará Mi Cáliz de Salvación.
Tan amargados, con corazones de piedra e infestados con la
mancha de Satanás, ellos combatirán a aquellos que aman a Dios.
Su número no igualará a aquellos que siguen la Verdad, sin
embargo, su odio los inspirará a tramar actos malignos que destruirán esta paz
y calma.
Esto orquestará un plan para convencer al mundo de que este acontecimiento fue, en efecto, un accidente cósmico, que ellos dirán que los
científicos pueden probar. Muchos, tristemente, creerán entonces que este es el
caso y muchos de los hijos de Dios volverán a las antiguas vidas pecaminosas
que llevaron una vez.
La batalla por las almas comenzará entonces y llevará algún
tiempo para que esto alcance la confrontación final cuando Mi Segunda Venida
ponga fin a la perversión.
Mis queridos seguidores, no permitáis que estas revelaciones
os causen miedo.
En vez de eso, prepararos para este Glorioso Acontecimiento
y permitid que vuestras almas lo acojan.
Aceptad este maravilloso Acto Divino para fortalecer vuestra
determinación y difundir Mi amor más a fondo entre vuestras familias y amigos.
Estad orgullosos de vuestro vínculo hacia Mí, vuestro Jesús,
y ayudadme a rescatar a aquellas almas que rechazarán aceptar Mi Misericordia.
Id. Preparaos. Regocijaos porque el tiempo está cerca.
Yo os amo.
Vuestro Jesús
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