Miércoles 14 de mayo de 2014 a las 23:30 hrs.
Mi queridísima bienamada hija, las Gracias que presento
al mundo convertirán a los no-creyentes en devotos seguidores Míos. Ellos
se convertirán al instante, y caerán al suelo delante de Mí en amorosa
servidumbre.
Aquellos que me traicionaron, durante toda su vida y que me
echaron fuera, vendrán hacia adelante y me suplicarán que los acepte como Míos. Aquellos
que conspiran contra de Mi Palabra serán, sin embargo, los más difíciles de
salvar. Porque son más conscientes que los ignorantes del significado de
Mi Palabra y, sin embargo, a sabiendas, tratan de reescribirla para satisfacer
su autoestima arrogante. Por todos sus conocimientos, no ven la Verdad
porque se niegan a verla. No van a proclamar la Verdad absoluta sino que
la fabricarán, con el fin de engañar a los demás.
Algunas personas se han vuelto contra Mí porque creen que su
vocación de estar a Mi servicio ha dado como resultado que se les haya otorgado
la iluminación. Ellos piensan que tienen la autoridad, concedida a través del
poder del Espíritu Santo, para adaptar Mis Enseñanzas, de manera que no ofendan
a la sociedad moderna. Su orgullo será su caída y su caída de la Gracia
será presenciada por muchos, que se sentirán engañados porque fueron conducidos
al error. Otros, entre ellos, saben exactamente lo que están haciendo,
porque no es a Mí a quien sirven - es al maligno. Deliberadamente caminan
entre vosotros con el fin de destruir la Verdadera Palabra de Dios. Ellos
no se arrepentirán, ni aceptarán Mi Mano, porque creen las mentiras de la
bestia, que les ha prometido a Mis enemigos, por siglos, su paraíso por
venir. Y han elegido creer en este elaborado engaño debido a su avaricia y
ambición. En el momento en que se den cuenta de la Verdad, serán arrojados
al abismo. Estos son solo algunos de los desafortunados y engañados que
habrán negado la existencia del diablo, por lo que es, y el pozo sin fondo
dentro del cual él morará por la eternidad.
Advierto a todos los hijos de Dios que al seguir los malos
caminos, al rechazar la Palabra de Dios y al cometer pecado mortal, que esto va
a resultar en un castigo. Cualquiera que os diga lo contrario os
engaña. Sin embargo, Yo salvaré a los arrepentidos hasta en el último
segundo, tanto es lo que Yo anhelo salvar a cada uno de vosotros.
Mi Amor, Mi Misericordia, Mi Compasión serán vuestra Gracia
salvadora. No quiero asustaros, pero debo deciros la Verdad. Al venir
a Mí - no importa cuáles sean vuestras creencias, al final - os reuniré como
Míos. Nunca olvidéis esta Promesa. Lo haré, lo prometo, os alcanzaré
en la profundidad de vuestra desesperación.
Vuestro Jesús