Viernes 9 de enero de 2015 a las 15:30 hrs.
Mi muy querida bienamada hija, es hora de que los Cristianos
de todo el mundo se unan en contra el desprecio que es mostrado por miles de
millones en contra de la Verdad - la Santa Palabra de Dios.
Todo pecado contra Dios es ahora considerado como aceptable
a Mis Ojos. Los pecados que son abominables para Mí pronto se presentarán
como siendo santos ante Mis Ojos, pero esto jamás puede ser. Si vosotros
presentáis algo, que no viene de Mí, y lo colocáis delante de Mí en Mis
Iglesias, entonces me causáis un gran dolor.
Nunca ha sido tan difícil para los Cristianos seguir Mi
Espinoso/Escabroso Camino como lo es hoy. Mentiras, mentiras,
mentiras, se os están dando en Mi Nombre, y nunca debéis olvidar Mis Enseñanzas
o seréis engañados por aquellos que conspiran en contra de la Palabra de
Dios. Ser Cristiano requiere mucho más que declarar serlo. Si sois
verdaderos Cristianos entonces haréis todo lo que os enseñé y seguiréis la
Santa Doctrina contenida en la Santa Biblia. Reconocer/admitir Mi Palabra
es una cosa, pero llevar a cabo lo que Yo enseñé es otra.
Amarse los unos a los otros nunca es fácil debido a la
existencia del pecado. Amar a vuestros enemigos supone una gran carga
sobre vosotros pero si oráis por las gracias para hacerlo, entonces
encontraréis que vuestro amor por Mí crece. Si me amáis verdaderamente
estaréis libres de odio, y entonces podréis encontrar la verdadera paz de la
mente y el alma. Si vosotros permitís que Satanás os incite/provoque
a odiar a otros, vais a caer en una terrible oscuridad. El odio es como
una mala hierba que crece y se propaga rápidamente. Cuando el odio se
encona(se agudiza) en el alma, éste con el tiempo, la devorará por
completo. Esto traerá consigo una inquietud angustiosa y los que estén
llenos de él nunca encontrarán la paz. El odio engendra odio y se propaga
rápidamente de un alma a la siguiente. Una vez que Satanás se establece en
estas almas, nunca las abandonará hasta que se arrepientan y muestren verdadero
remordimiento.
El Amor sofoca toda clase de odio pero, a menos que
retiréis/apartéis vuestras almas de aquellos que incitan al odio, seréis
sumergidos en la desesperación. No puedo salvar un alma que no se
arrepienta de su maldad. Espero vuestra confesión y cuando vengáis a Mí y
me supliquéis que os exima/libere de la maldición del odio, Yo estiraré el
brazo(tenderé la mano) y os regresaré de la mano hacia Mi Refugio de Paz.
La paz y el amor solo pueden venir de Dios. Procurad
siempre buscarme porque Yo Soy el Amor. Si falta el amor, Yo estoy ausente
en el alma.
Vuestro Jesús