Domingo 27 de julio de 2014
Mi muy querida bienamada hija, Mi Paz será tuya pronto y
de todos los que me sirven, a Mí Jesucristo, en esta vida, dada al mundo por el
Poder de Mi amado Padre.
Bendigo a todos vosotros que tratáis de seguir siendo fieles
a Mi Palabra y, sobre todo, a todos aquellos que están privados de ella. Mientras
que vosotros podéis pensar que la gente de todas las otras religiones,
incluyendo a aquellos que no creen en Mi Padre Eterno o aquellos que no me
aceptan a Mí, Jesucristo, el Salvador del mundo, están perdidos, eso sería
incorrecto. Cada alma que trata de/intenta buscar la perfección
espiritual y que puede ser ignorante de la Verdad es amada por Mi Padre, Quien
es Todo Amor, Todopoderoso y Perfecto en todo lo que Él hace.
La raza humana es imperfecta a causa del pecado y sin
embargo, cada hombre fue creado a la imagen de Aquel Quien le dio la
vida. Como tal, cada hombre, mujer y niño llegará a ser perfecto,
tanto en cuerpo y en alma, de nuevo, una vez que se erradique la plaga del
pecado. Cuando los enemigos de Dios sean desterrados y cuando la
imperfección del cuerpo y el alma ya no creen obstáculos entre el hombre y
Dios, todo será Uno con Mi Padre. El Nuevo Reino, que consiste en el Cielo
y la Tierra, se convertirá en uno. El hombre se convertirá en Uno en Dios,
a través de Mí, Su Hijo Unigénito y Su Plan para el mundo se consumará.
Vosotros jamás podéis sentiros completos, porque una vez que
el pecado existe, éste ocasiona la separación de Dios. Pero llegará
el momento en que toda la aflicción, la cual mina la Tierra, sea aniquilada. El
amor y alegría la inundarán y un mundo perfecto reemplazará todo lo que está
manchado y corrupto.
Solo entonces toda la Creación de Dios llegará a estar
completa de nuevo.
Vuestro Jesús