Viernes 17 de febrero del 2012 a las 15:30 hrs.
Soy su amada Madre, la Reina de los Ángeles, la Virgen
María, la Inmaculada Concepción.
Oh, cómo lloro hoy mientras Irlanda, el país más dedicado a
mí, su amada Madre, cae presa del maligno.
Gran oscuridad ha caído sobre esta nación. Muchos han
perdido su fe, así como muchos han vuelto sus corazones lejos de mi amado Hijo,
Jesucristo.
Mis hijos en Irlanda, han permitido al maligno que les vuelva
sus corazones en piedra.
Aquellos que aman a mi Hijo están sufriendo mientras
presencian el secularismo que ha tomado el control sobre este, una vez santo,
país.
Se están haciendo intentos ahora para introducir el aborto y
si esto sucediera, ofendería profundamente a mi Precioso Hijo.
Hijos Míos, si introducen el aborto en Irlanda, romperán el
vínculo que les ha traído tan cerca de mi corazón.
Muchas personas en Irlanda ahora insultan a mi Hijo por el
irrespeto que muestran hacia Él. Yo también no soy más tolerada y mi nombre es
degradado.
Hijos de Irlanda, elegidos como almas especiales para
impartir la Palabra de mi Padre por todo el mundo, deben escucharme.
Recen, recen, recen para que estos planes de introducir las
leyes del aborto no se realicen.
Si esto sucede, Irlanda perderá mucho favor en el Reino de
mi Padre.
El pecado del aborto es el más grave ante los ojos de mi
padre. Esta es la peor forma de genocidio.
Ustedes deben combatir este mal, hijos. Lo deben de hacer
ahora o el último vínculo divino que necesita ser fortalecido, en cambio, será
debilitado.
Deben levantarse, hijos y reclamar su fe católica y
cristiana, porque les está siendo robada.
No permitan que esos con poder, se burlen de ustedes, cuando
proclaman la Santa Palabra de Dios.
Este espíritu de oscuridad tiene ahora, no solo cubierto el
país de ustedes, sino los santuarios en los que se supone que debo ser
venerada.
Lloro de aflicción mientras veo a mi amada Irlanda caer al
borde del camino.
No obstante hay una esperanza, hijos. Pero ahora deben
unirse, en fuerza, para proteger su fe.
Muy pronto ustedes serán forzados a abandonar, no solo su fe
católica, sino su fe cristiana.
Reclamen su país del socialismo y de los dictadores
seculares.
Ellos implorarán por el derecho de los ciudadanos, pero les
serán negados los derechos propios que reclaman proteger, incluyendo el derecho
de rezar.
Ellos les forzarán a aceptar, en ley, el derecho de asesinar
niños que aún no han nacido.
Recuerden que cada alma fue amorosamente creada por Dios el
Padre Todopoderoso.
Cualquier hombre que elija el aborto o asista en el perverso
acto del aborto, comete pecado mortal.
Recen, recen, recen mi Cruzada de Oración por Irlanda (32):
“Oh Madre de la Salvación, ruega por tus hijos en Irlanda
para que impidan que el acto perverso del aborto sea impuesto sobre nosotros.
Protege a esta santa nación de caer más profundo en la desesperanza de la
oscuridad que cubre nuestro país. Líbranos del maligno que quiere destruir a
Tus hijos que aún no han nacido. Pide que esos líderes tengan la valentía de
escuchar a aquellos que aman a tu Hijo, para que así ellos sigan las Enseñanzas
de Nuestro Señor Jesucristo. Amén”
Ve ahora mi niña y dile a Mis hijos en Irlanda que deben ser
fuertes. Deben levantarse por lo que es correcto.
Nunca deben estar temerosos de proclamar la verdad, la Santa
Palabra de Dios, no importa cuán difícil esto pueda ser.
Vuestra amada Reina del Cielo,
Madre de la Salvación.
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