Domingo 14 de diciembre de 2014 a las 18:00 hrs.
Mi muy querida bienamada hija, a Mi pueblo le fue dado por
Mi un gran Regalo mediante Mi Muerte en la Cruz. Este Sacrificio, dado/entregado para
redimir al mundo de una muerte segura, es parte del Pacto Definitivo de Mi
Padre antes del Gran Día cuando Él recupere/rescate al remanente de la
Tierra.
Generación tras generación habló de la Verdad, contenida en
el Libro de Mi Padre, y Sus servidores/siervos consagrados respaldaron la
Palabra de Dios. ¡Cuánto habéis olvidado y qué poco conocéis! Muchos de
los que fueron nombrados para que os dirijan se han equivocado y sus orgullosas
cabezas, bien altas, mientras se aventuran en(prueban) la Palabra de Dios,
caerán de vergüenza y temor cuando se enfrenten al Aviso del Cielo. A estos
servidores/siervos consagrados tengo esto que decir:
Vuestras obras para con otros no significan nada para
Mí pues seréis juzgados por vuestra fidelidad a la Verdad. Os castigaré y Mi
Justicia será implacable hasta que rompáis vuestras leyes paganas y proclaméis
la Palabra dada a vosotros hace tanto tiempo. Vuestro desprecio por las Leyes
de Dios me trae mucha pena pero vuestro engaño, el cual me costará almas,
culminará en vuestra ruina. Aquellos de Mi pueblo, que viven según la Palabra
de Dios, a pesar de que no son nada ante vuestros ojos, se sentarán en las
Sillas del Juicio cuando vosotros sean llamados para responder, delante de Mí,
las razones por las que engañásteis a Mi pueblo. Vosotros podéis creer que
vuestro poder e influencia están más allá de reproche, pero sabed que vuestra
gloria se desvanecerá y pronto; el oro y las capas/mantas blancas que
vestís serán convertidos en harapos y vuestras brillantes coronas
reemplazadas con maleza(mala hierba).
De todos los pecados del mundo, no hay nada peor ante Mis
Ojos, que esos hipócritas que posan como servidores/siervos Míos, pero que
no Me sirven. Cuando llegue el tiempo en donde blasfemarán contra Mí, y
alimentarán a los hijos de Dios con mentiras sobre el significado del pecado,
enviaré sobre vosotros un castigo tan grande que vais a tener dificultades para
recuperar vuestro aliento. Granizos de tan grandes dimensiones se lanzarán
desde el Cielo y por cada Iglesia que haya sido entregada a Mis enemigos, donde
ellos profanarán Mis Altares, grandes inundaciones las destruirán. Porque cada
crimen que cometéis contra Mí, vosotros lo cometéis contra un hijo de
Dios. Y por eso, os enviaré advertencia tras advertencia hasta que rechacéis la
nueva doctrina falsa; hasta que habléis la Verdad - la Santa Palabra de Dios -
y defendáis los Sacramentos como se os fueron enseñados en el principio.
Mediante estos mensajes Yo os recordaré la Verdad y voy a
seguir advirtiéndoos hasta el día en que decidáis a quién elegir – a Mí o a
aquellos que profesan que son Míos pero que son esclavos de la Bestia.
Vuestro Jesús