Domingo 9 de noviembre de 2014 a las 15:20 hrs.
Mi muy querida y bienamada hija, todo lo que Yo siempre
quise hacer era salvar las almas de los hijos de Dios. Todo lo que Mi
Padre Eterno deseó era que Sus hijos lo amen como Él los ama.
Incluso cuando Su primogénito rechazó Su amor (Adán), Mi
amado Padre elaboró Sus Diez Mandamientos, para capacitar al hombre para
vivir conforme a Sus Reglas. El deseo del hombre debe ser siempre servir a
Su Maestro y para ello tiene que mostrar amor a sus hermanos y hermanas. Mediante
la observación de las Leyes de Dios, él(el hombre) se mantendrá fiel a Él
y estará más cerca de Él. Pero, rechazando los Diez Mandamientos, el
hombre pone una gran distancia entre Dios y él.
Mi Última Misión, para traer al hombre los frutos de su
salvación, ha dado muchos Regalos. Yo deseo ahora que cada uno de vosotros
recitéis a partir de este día, y todos los días de aquí en adelante, la Cruzada
de Oración (33) y que mantengáis una copia del Sello del Dios Vivo cerca de
vosotros. Muchas personas que pueden no estar conscientes de esta Misión
también pueden recibir la Protección del Sello cuando vosotros oréis por ellos,
mientras recitáis esta oración.
Todos los hijos de Dios que tienen el Sello del Dios Vivo
serán inmunes a los problemas, que vendrán mientras se desarrolla la Gran
Tribulación. Os pido que lo hagáis hoy porque Yo os prometo gran
protección contra los perseguidores de la Fe Cristiana y la agitaciones, las
cuales serán presenciadas en los cuatro rincones de la tierra. Os pido que
no permitáis que el miedo de cualquier tipo preocupe vuestros
corazones. Mientras Yo deseo salvar a todo el mundo, fuera de Mi
Misericordia, declaro/anuncio que voy a salvar cinco billones* de
almas debido a esta Misión. Declaro que esta es una de las más grandes
Misericordias que he legado a los hijos de Dios en toda la historia del mundo.
También sabed que voy a reducir el sufrimiento, que será
infligido a la humanidad por la bestia, tanta es Mi Misericordia. Pero en
primer lugar, el Castigo de Dios será presenciado porque éste ha sido predicho,
y es una parte necesaria de la purificación final de hombre.
Confiad en Mí. Levantad vuestros corazones y nunca temáis
al mal y a la maldad de la que seréis testigos en breve. Permitid que la
alegría llene vuestras almas si creéis en Mí. Voy a salvar a todos aquellos por
quienes supliquéis Mi Misericordia, a través de la recitación de Mi Cruzada de
Oraciones. El único pecado, que no puede ser perdonado, es el pecado
eterno de la blasfemia contra el Espíritu Santo.
Hoy es el día en que Yo prometo solemnemente traer a la
humanidad el amor, la paz y la alegría de Mi Reino a través de la salvación de
cinco billones de almas.
Os amo y aprecio a todos vosotros. No hay nada que Yo
no pueda hacer por vosotros, si esta es la Voluntad de Dios. Todo lo que
debéis hacer es pedir.
Vuestro Jesús
billones* : 1 billón= 1,000,000,000,000