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lunes, 10 de febrero de 2014

Madre de la Salvación: Estas Oraciones, queridos hijos, vienen con grandes Gracias

Miércoles 5 de febrero de 2014 a las 15:27 hrs.


Hija mía, es más difícil para las almas - que una vez conocieron a mi Hijo y después se desviaron lejos de Él - volver a Él, que para aquellas que nunca jamás supieron de Él.

Cuando experimentáis el Amor de Jesús, y luego le dais la espalda, esto crea un gran vacío en vuestra vida. Nada puede nunca reemplazar Su Presencia. Así que cuando un alma intenta volver a Él y aunque mi Hijo siempre los espera con gran Amor y Paciencia, esa persona aún está insegura de cómo abrir su corazón.

Si os sentís distanciados de mi Hijo, no debéis nunca tener miedo de llamarle. Nunca debéis tener vergüenza de mostraros vosotros mismos ante Él, porque Él es Todo-Misericordioso y perdonará a cualquier pecador, cuando un alma arrepentida le pida a Él que lo haga.

Cuando deseéis llamar a mi Hijo, debéis simplemente llamarle para que os atraiga a  Su Misericordia y dejadle el resto a Él.

Aquí tenéis una Cruzada de Oración especial (133)

Una Llamada para volver a Dios:
Querido Jesús, perdóname, un alma distanciada, que renunció a Ti porque estaba ciego. Perdóname por reemplazar Tu Amor por cosas inútiles que no valen nada. Ayúdame a armarme de valor para caminar a Tu Lado, y a aceptar con gratitud Tu Amor y Misericordia. Ayúdame a permanecer cerca de Tu Sagrado Corazón y a nunca volver a desviarme lejos de Ti. Amén

Aquellos que no conocen a mi Hijo y que desean ser llevados delante del Trono de Dios, el Altísimo, deben recitar esta Cruzada de Oración (134)

Para creer en la Existencia de Dios:
Oh Dios el Altísimo, ayúdame a creer en Tu Existencia. Echa todas mis dudas a un lado. Abre mis ojos a la Verdad de la vida después de esta vida y guíame hacia el camino a la Vida Eterna. Por favor déjame sentir Tu Presencia y gratifícame con el Don de la verdadera fe antes del día que yo muera. Amén.

Estas Oraciones, queridos hijos, traen grandes Gracias y a aquellos que las reciten se les mostrará la Verdad y sus corazones serán llenados con un gran amor, el cual ellos nunca habrán experimentado en la Tierra antes. Luego, sus almas serán purificadas.

Id ahora, sabiendo que cuando estáis cerca de Dios, seréis bendecidos con la Gracia de una gran paz.

Vuestra bienamada Madre
Madre de la Salvación