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martes, 12 de noviembre de 2013

No me quedaré a un lado mirando mientras destruyen sus vidas, las cuales pueden ser suyas por la eternidad

Sábado 26 de octubre de 2013 a las 17:52 hrs.


Mi amadísima hija, cuando la gente intenta determinar a cuáles de los hijos de Dios deseo traer Mi Misericordia - la respuesta es, a todos ellos. No discrimino, porque amo a cada alma nacida, cada una de las cuales fue creada por Mi Padre. Ningún alma puede ser excluida de esta Mi Misión final para salvar a la humanidad. Vengo a traer la salvación a todos.

Pregunten a cualquier buen padre si sacrificaría a un hijo sobre otro y les diría esto, “No importa cuán mal se comporten o me lastimen, nunca puedo rechazarlos, porque ellos son parte de mi carne.” Lo mismo es cierto de los enemigos de Dios. Lo ofenden y le causan gran dolor, pero Él aún los ama, porque vinieron de Él, aunque ellos están hambrientos, debido al pecado de la humanidad.

¿Cómo es que, pueden preguntar, puedo perdonar a aquellos quienes me lastiman más? ¿Quienes azotan a otros y les causan dolor y sufrimiento? Es porque los amo. Siempre amaré al pecador. Sus pecados me repugnan, pero siempre estaré esperando para acogerlos.

Esta misión es acerca del perdón. Es toda acerca de salvar sus almas. Aunque Mis palabras puedan ser a veces duras, les son dadas porque los amo y no puedo soportar los pensamientos de perderlos. Aquellos quienes me han traicionado, debido a las ambiciones de la vida, nunca deben tener miedo de venir a Mí y pedir Mi ayuda. Los extraño. Estoy afligido, pero utilizaré toda intervención sin violar la Alianza de Mi Padre del libre albedrío, el cual siempre seguirá siendo suyo hasta el nuevo comienzo. Nada que hagan los separará de Mí cuando me pidan que los perdone.

Envolveré al mundo en Mi Misericordia y por cada acto malvado realizado por Mis enemigos, para arrastrarlos al error, prometo que intervendré. No los echaré a los lobos, quienes quieren devorarlos. No me quedaré a un lado mirando mientras destruyen sus vidas, las cuales pueden ser suyas por la eternidad. Los sostendré justo hasta el momento cuando tendrán que tomar la decisión final. No soltaré su alma tan fácilmente. Morí una muerte cruel para salvarlos. Esta vez, presenciarán una poderosísima Intervención Divina para reconquistarlos.Ustedes son Míos. Yo Soy de ustedes. La bestia no conquistará almas fácilmente, ya que Yo Soy Dios, una fuerza formidable. YO Soy Todopoderoso. Satanás no tiene nada, pero su astucia atraerá a aquellos débiles entre ustedes. Insto a todos ustedes, quienes me aman, a que recen que el débil acepte Mi Intervención Divina con amor en sus corazones.

Su Jesús