Lunes 27 de octubre de 2014 a las 16:20 hrs.
Hija mía, es importante recordar el rezo de mi Santísimo
Rosario todos los días, con la finalidad de proteger esta Misión, y otras
misiones, aprobadas por mi Padre Eterno para el mundo.
Los Cristianos que defienden la Fe encontrarán que es muy
difícil seguir declarando su devoción a mí, la Inmaculada Virgen María, Madre
de Dios, en estos tiempos. Mi papel/labor como Madre de los hijos de Dios
está siendo socavado y descartado, y, en particular, por ciertos grupos
Católicos que no proceden de mi Hijo. Ese tipo de grupos dan la impresión
de que son devotos de la Iglesia de mi Hijo, pero ellos no practican lo que Él
les enseñó. Ellos persiguen a aquellos que defienden la Verdad y hacen
hasta lo imposible para desestimar/denegar, como absurdas, todo tipo de revelaciones
privadas dadas a la humanidad desde la Muerte de mi Hijo en la Cruz. Si no
fuese por las revelaciones privadas, dadas al mundo por mí, la Madre de Dios,
como mensajera de Cristo, muchos nunca se habrían convertido a la Verdad. En
vez de eso, muchos habrían continuado caminando en la oscuridad, desestimando/rechazando la
Existencia de Dios y evitando la oración - la puerta que, cuando se abre,
ilumina al alma. Mi papel/labor como Madre de Dios está siendo atacado en
todo el mundo, a causa del poder que se me ha dado para destruir al perverso
adversario. Yo aplastaré la cabeza de la serpiente, como fue predicho, pero
aquellos que me muestran devoción, serán despreciados y ridiculizados por
los impostores, que se atreven a proclamarse especialistas en las enseñanzas de
la Iglesia.
Mi Hijo detesta cualquier tipo de odio mostrado por el
hombre para con su hermano. Él derrama lágrimas cuando alguien dice que
representa a la Iglesia de mi Hijo, y, en seguida, incita al odio contra un
hijo de Dios. Él sufre el dolor de Su Crucifixión cada vez que un siervo de Su
Iglesia lastima a otro o causa sufrimento terríble a los inocentes.
Hijos, vosotros debéis orar fuertemente por la Iglesia de mi
Hijo, que está bajo el mayor ataque desde su fundación. Los enemigos de mi Hijo
tienen muchos planes para destruírla y, la mayoria de estos, vendrán desde
adentro. Prestad atención a mi advertencia, y a aquello que yo revelé al mundo
en Fátima. El enemigo aguarda y, en breve, él controlará completamente la
Iglesia de mi Hijo en la tierra y millones serán conducidos/guiados hacia
el error.
Cerrad vuestros oídos cuando oyerais que los siervos de mi
Hijo son despreciados o calumniados por defender la Palabra de Dios. Acordaos
siempre de que el amor proviene de Dios y que, cualquier persona u organización
que os anime a hacer un juicio sobre un hombre - independientemente de lo que
él haya hecho -, debe ser cuestionada. Vosotros no podéis declararos ser
siervos/servidores de Dios y, en seguida, decir al mundo que lance
calumnias sobre otra persona. Vosotros nunca podéis tolerar la incitación al
odio de cualquier tipo. Cualquier persona que haga esto, en Nombre de mi
Hijo, jamás debe ser apoyada, porque esto nunca podría venir de Dios. Mi
Rosario debe ser recitado, tan frecuentemente como sea posible, para aplastar
al mal, que aprisiona al mundo en un tiempo en que la crueldad de cualquier
tipo es considerada como justa.
El amor del hombre hacia su hermano se volvió escaso, y la
caridad entre los Cristianos se ha diluído. Vosotros debéis abrir los ojos a la
Verdad y acordarse de lo que mi Hijo os enseñó. Es tan claro como el día,
porque fue escrito para que el mundo lo lea en la Santísima Bíblia.
Vuestra amada Madre
Madre de la Salvación