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jueves, 2 de octubre de 2014

Decir que sois de Mí es una cosa. Ser de Mí es otra

Martes 16 de septiembre de 2014 a las 20:25 hrs.


Mi muy querida bienamada hija, cuando el mundo parece estar en desorden, no temáis, porque Dios está al mando de todas las cosas.

Él permite al maligno solo cierto poder y Él luchará para asegurar que el Espíritu Santo siga estando activo, para que así los hombres buenos luchen con éxito la batalla en Mi Plan de Salvación.  La maldad en todas sus formas es una característica del diablo. Para evitar ser infestados por Satanás, no debéis decir ningún mal, no escuchar ningún mal, ni llevar a cabo malas acciones en contra de una persona viva. Decir que sois de Mí es una cosa. Ser de Mí es otra.

Yo, cuando estoy verdaderamente presente en un alma, haré todo en Mi Poder para impedir/detener que esas almas lleven a cabo actos de maldad. Si el alma confía en Mí, completamente, entonces él o ella encontrará más fácil ser guiada por Mí. Si la voluntad de la persona es muy fuerte, y si es orgullosa y obstinada, entonces  será fácilmente guiada por el engañador que le va a engañar de numerosas maneras. Él convencerá a la persona que un acto malvado, una mala lengua o un acto de blasfemia son aceptables, en ciertos casos. Y entonces esa alma caerá en el engaño. A esas almas les digo esto:

No habléis mal de otro, no sucumbáis a la calumnia, no os coloquéis vosotros mismos como un juez sobre otro y no condenéis/denunciéis a otra alma en Mi Santo Nombre. En caso de cometer tales ofensas en contra Mía, os precipitaréis desde este nivel de iniquidad/maldad hacia una oscuridad, que creará una gran división entre nosotros. Cuando esa división crece, y cuanto más os alejéis de Mí, sentiréis un terrible vacío - un sentimiento prolongado de tal soledad profunda, que sentiréis una sensación de pánico, el cual no podréis identificar. Entonces sentiréis la separación de Dios, que las almas en el Purgatorio  y en el Infierno padecen. Si podéis aprender de esto ahora, entonces encontraréis más fácil aproximaros más cerca de Mí.

Recordad, debéis expulsar todos los pensamientos de odio en vuestra alma primero. Yo no puedo estar presente en un alma que está llena de odio, por que esto es imposible.
Vuestro Jesús