Martes 14 de enero, 2014 a las 16:53
Mi queridísima bienamada hija, cuando Mis siervos, Mis
seguidores y todos aquellos quienes afirman ser de Mí, dicen que me aman, esto
significa dos cosas. Ellos me aman porque aceptan Mi Palabra, y me honran al
declarar la Verdad.
Si me amáis, debéis permanecer fieles a Mi Santa Palabra. Esto
quiere decir ser obedientes a Mi Palabra en todas las cosas relacionadas a la
Verdad. Si váis a declarar la Verdad de Mi Palabra, como Mis sagrados siervos,
debéis permanecer obedientes a la Palabra de Dios.
Si Mi Iglesia sostiene la Palabra de Dios, debéis permanecer
obedientes a Mi Iglesia. Pero cuando llegue el día en que esos con autoridad en
Mi Iglesia no proclamen más la Verdad, entonces debéis seguir siendo obedientes
sólo a Mí. Porque Yo Soy la Iglesia. Sin Mí, vuestro Jesús, no hay Iglesia.
Cuando Mi Palabra sea falseada* y luego adaptada,
ya no será más Mi Palabra. Vosotros sólo podéis ser obedientes a la Verdadera
palabra de Dios. Si seguís a una nueva doctrina creada por el hombre - la
cual reemplace a Mi Santa Palabra de Mis Iglesias a través del mundo -
entonces, aquellos responsables de este sacrilegio Me negaréis. Solo
seguid obedientes a aquellos que proclamen la Palabra de Dios, pues si no es Mi
Palabra, entonces no es de Dios.
La Palabra de Dios es Sacrosanta. Nunca debe ser cambiada
por nadie. La obediencia a Mi Iglesia es importante. La obediencia a la Palabra
de Dios es lo que determina si sois un Cristiano. El día que reemplacéis la
Palabra de Dios, por un substituto creado por el hombre, será el día que
desobedeceráis la Palabra de Dios.
Podéis permanecer unicamente obediente a Mis Ojos, en Mi
Iglesia en la Tierra, si la Verdad es sostenida/defendida. Nunca debéis tener
miedo de proclamar la Verdad, porque sólo la Verdad os hará libres.
Vuestro Jesús
Falseada* = que se le altera o modifica algo