Lunes 30 de diciembre de 2013 a las 20:06 hrs.
Mi muy querida y bienamada hija, cuando cuestionáis Mi
Autoridad, estáis negando la Verdad. Cuando Mi Palabra, que está grabada en
piedra(innamovible), es desafiada por vosotros, entonces no estáis aceptando la
Verdad. Cuando tratáis de reescribir la Palabra de Dios, sois culpables de
blasfemia. El mundo fue prevenido de que nadie – ningún siervo sagrado, ni
alma elegida, ni profeta – podría jamás añadir o quitar nada de la Palabra
establecida/asentada en el Libro de Mi Padre. Pues bien, eso es
exactamente lo que va a suceder cuando aquellos que proclaman ser líderes
elegidos en Mi Iglesia en la Tierra manipulen indebidamente la Verdad. Ese día
está muy cerca. Ese es el día, del cual fuisteis avisados/advertidos. Para
cualquiera que ose falsificar la Palabra será como decir que él está por encima
de Dios. Aquél que reclame estar por encima de Dios, por sus actos o
escrituras, no puede ser nunca representante Mío.
Debido a que la fe del hombre es tan frágil y a que existe
poco conocimiento del Nuevo Testamento, muchos seréis engañados a aceptar
herejías como si fuera la Verdad. Ésto será vuestra perdición.
Mi intervención será a través de la lluvia/efusión del
Espíritu Santo, para iluminar a los que permanecen leales a Mí. Ahora, esa
prueba será como sigue: Si vosotros realmente creéis en Mi Existencia, en Mi
Misión, en Mi Crucifixión, en Mi Resurrección de los muertos y en la Promesa de
Salvación, entonces vosotros nunca desafiaréis Mi Palabra, dada a vosotros en
la Santa Biblia. Si creéis por un minuto que yo bendeciría cualquier nueva
interpretación de Mis Evangelios, de los Mandamientos de Dios y de todo lo que
fue enseñado por Mi, a fin de satisfacer a la sociedad moderna, entonces estáis
muy equivocados.
El día cuando el líder, que afirma liderar Mi Iglesia en la
Tierra, os diga que ciertos pecados no importan ya, ése será el día del
Principio del Fin. Porque éste será el día del que debéis estar atentos. Éste
será el día en el que Mi Iglesia entrará en la era de las tinieblas. A
partir de ése día, debéis no dejaros tentar para negarme – negando la Verdad.
Las mentiras nunca pueden reemplazar a la Verdad.
Vuestro Jesus