Martes 22 de octubre de 2013 a las 00:20 hrs.
Mi amadísima hija, cada rincón de Mi Iglesia está siendo
preparado para los nuevos rituales. Declaraciones públicas de la necesidad de
ser humilde y cariñoso establecerán la precedencia para la filantropía secular,
la cual será presentada por el anticristo. Todos estos siervos de Satanás se
están uniendo en celebraciones en privado y su red mundial creará beneficencias
globales, establecidas para convencerlos de que son divinamente inspiradas.
Todos aquellos quienes usen el triángulo, el signo de la
trinidad profanísima, estarán involucrados en respaldar tales beneficencias,
para que los eleve a los ojos del mundo. Repentinamente se hablará sobre un
nuevo, poderoso y así llamado movimiento evangélico y la gente le entregará su
dinero para ayudar a aumentar sus esfuerzos para ayudar a los pobres del mundo.
Todos creerán que se está haciendo el mayor bien y ciertos líderes en Mis
Iglesias serán admirados en todos los rincones de la Tierra. Muy pocos
argumentarán acerca de sus intenciones, pero cuando vean los más grandes bancos
del mundo unírseles en sus esfuerzos, sabrán entonces que este es un acto
diseñado para engañarlos. Cuán astuta es la bestia. Cuán listas sus acciones
parecen ser, porque estarán dulcemente cubiertas con una forma de engaño, el
cual solo aquellos bendecidos con el Don del Espíritu Santo serán capaces de
discernir. Y durante toda la habladuría sobre el bien común del hombre, el
deseo de reunir a todas las religiones para formar una gran comunión de
personas - no se pronunciará ni una palabra sobre Mi Enseñanza que los hijos de
Dios deben permanecer firmes a Mi Santa Palabra.
Los tiempos se están moviendo rápidamente y en medio de
esta, aparentemente bien-ordenada y cuidadosamente orquestada propaganda, las
grietas comenzarán a aparecer. Cuando Satanás está obrando, la confusión se
difunde; la división es creada; las contradicciones se vuelven descontroladas y
nada está jamás ordenado. Ciertos honores, concedidos a Mí ante Mis Sagrarios,
desaparecerán. Las Horas de Adoración Perpetua serán canceladas y pronto
despojarán a las Iglesias de las estatuas de los santos. Todas sus acciones
serán justificadas en nombre del desarraigo de la Iglesia de antaño y
haciéndola más relevante, más atractiva y más atrayente para los no creyentes.
Aquellos quienes me conocen deben hacer todo lo que puedan,
a través de la propagación de los Evangelios, porque, estén seguros, no oirán
hablar de la Santa Biblia. Las únicas citas que oirán serán aquellas, las
cuales se tuercen para respaldar mentiras. Conforme despojan a la Iglesia de su
dignidad, los castigos comenzarán a derramarse sobre ellos desde los Cielos.
Ellos, con el tiempo, serán detenidos, pero estas pruebas deben tener lugar
primero, como predicho.
Su Jesús