Miércoles 20 de noviembre de 2013 a las 14:15 hrs.
Mi amadísima hija, di a todos Mis seguidores -todos aquellos
que creen en Mí, Jesucristo- que tienen que asignar tiempo cada día para Mí en
oración, con el fin de salvar las almas de aquellos que están perdidos para Mí. Por
las Gracias, que os doy, deseo que a cambio, ayudéis a traerme las almas de los
que rompen Mi Corazón.
Debo pedir que soportéis el dolor que sentiréis, debido a la
separación de la humanidad de Mí, Jesucristo. Esto será causado por el
cisma en Mi Iglesia sobre la Tierra. Al aceptar este sufrimiento con la
completa sumisión, puedo conquistar el control/agarre, que el maligno ejerce
sobre aquellos demasiado débiles para proclamar la Verdadera Palabra de Dios. No
debéis temer nunca a esta Misión, pues es entregada al mundo gracias a la generosidad
de Mi Amado Padre. Él simplemente quiere reclamar/recuperar Su
Creación, intacta, de modo que no se pierda ni un solo hijo Suyo.
No importa quién os flagele, se burle de vosotros u os
persiga, sólo recordad el castigo, que ocurre a todos los que escupen en Mi
Rostro. Por tanto, ignorad las burlas, debéis orar fervientemente
por cada una de esas pobres almas. Sed generosos de corazón y se os
llenará con el Espíritu Santo, para que luego luchéis, junto a Mi Ejército
Celestial, para salvar al mundo del mal. Debéis esperar por lo tanto, con
amor y confianza, y Yo os traeré grandes Bendiciones.
La esperanza nunca debe ser desechada por causa del miedo. El
miedo nunca debe encegueceros a la tarea que se requiere de vosotros, así que
cuando llegue como el Rey de Misericordia, ni una sola alma se quedará con
ninguna duda en cuanto a Quién Soy y lo Qué Soy. Congregáos a la
vez. Uníos. Llevad a todas las almas dentro de Mis Brazos
Misericordiosos. Para ayudarme a hacer esto, debéis recitar esta Oración
especial de la Cruzada para ayudarme a reunir/congregar y unir a todas las
almas.
Cruzada de Oración (128) Para Reunir y unir a todas las almas:
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para
reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas
de Tu Gran Misericordia.
Refuérzanos con el Don del Espíritu Santo para asegurar que
la Llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti.
Úne a todos los pecadores, para que a cada uno sea dada toda posibilidad de
reconciliación.
Da a todos nosotros la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando
seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través
de los Santísimos Evangelios.
Permanecemos en Tí, Contigo y por Tí, cada paso de este,
nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Estad en paz. Confíad en Mí. Dejad todas vuestras
oraciones a Mis Pies y responderé a cada petición individual hecha a Mí para
salvar toda alma cuyo nombre me sea presentado.
Vuestro Jesús